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La conservación de la biodiversidad en Tabasco enfrenta a la necesidad de proveer alimentos y otros bienes económicos a una población creciente con la obligación de conservar la biodiversidad base de esos recursos en una región ecológicamente frágil. Conocer algunos arreglos del paisaje que combinan espacios productivos con los de conservación es un objeto importante de estudio para desarrollar modelos de manejo sustentable del territorio. Con ese objetivo se investigó la diversidad de aves, mariposas frugívoras diurnas, gasterópodos y flora arbórea presentes en potreros con árboles dispersos y en línea, acahuales jóvenes (< 15 años) y maduros (≥ 15 años) pertenecientes a la matriz agropecuaria, comparados con unidades de selva (en la cima, laderas y pie de monte, así como alterada por caminos). Los resultados muestran que los ensambles biológicos de los ecomosaicos de selva y matriz se complementan en el paisaje permitiendo que la riqueza y diversidad sean similares entre los mismos por su valor (Sppselva = 385, H'selva = 3.62, Sppmatriz = 411, H'matriz = 3.51) y en su conjunto conserven la mayoría de las especies esperadas para la zona (riqueza observada >86% de la riqueza esperada). La conservación biológica es facilitada por la complejidad estructural del paisaje y de distintas las unidades de manejo que se mantienen dinámicamente en el ejido, en especial por el aporte de los acahuales al valor de conservación de la biodiversidad de la matriz agropecuaria conectados a fragmentos mayores a 10 ha de la reserva comunitaria de selva mediana subperennifolia. Español

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