En base a datos de Temperatura y Precipitación proporcionados por estaciones metereológicas del país, y aplicando el sistema de Thornthwaite de 1948 se calcularon los elementos que componen dicho balance de agua, obteniéndose también estimaciones de los siguientes puntos esenciales: déficit y excedentes de agua. Como datos de gran utilidad para el conocimiento de los recursos hídricos de una región, en esta carta se señalan los déficits de agua y evapotranspiración real. El déficit de agua ocurre cuando la humedad del suelo se ha agotado y el agua disponible, se es que la hay, no alcanza a humedecer el suelo suno que se consume totalmente en evapotranspiración. El défecit media anual de agua es la suma de los déficits de agua observados durante diferentes periodos de tiempo en un año. Si éste déficit fuera satisfecho, por ejemplo mediante riego, podría desarrollarse teóricamente una cubierta vegetal homogénea de un metro de altitud, que no sufriera por carencias de agua. Este concepto por lo tanto resulta de utilidad para calcular el agua adicional ó riegos que requiere un cultivo, con demandas media de agua, para lograr un buen desarrollo. La cantidad de agua en milímetros señalada como déficit medio en la carta no es siempre es similar a los riegos reales efectuados debido a las distintas necesidades de diferentes cultivos para años particulares más secos ó húmedos, y a que generalmente los riegos se proporcionan en exceso para compesar pérdidas por conducción, pero el dato de déficit constituye una base adecuada para calcular la factibilidad económica de un proyecto por irrigación, entre otros usos que tienes esta información. La evapotranspiración real, ó sea la suma de pérdidas de agua por evaporación desde la superficie del suelo y transpiración de las plantas, se representa con el fin de contabilizar estas pérdidas y obtener el saldo, como excedentes, respecto al total de precipitación.

Los datos para realizar el recuadro de escurrimientos fueron calculados de la fracción de la precipitación que es susceptible de escurrir, y se encontró una gran correlación con los datos de escurrimiento que proporcionan las estaciones hidrométricas.