En el estado de Chiapas existe una amplia gama de mangos cultivados que podrían ser potencialmente importantes para el mejoramiento genético de la especie. Las características fenotípicas de frutos y árboles son indicadores para diferenciar a los mangos criollos de Chiapas de los comerciales, aunque no son precisos. En este trabajo se determinó la diversidad isoenzimática de 16 colectas de mangos criollos y cinco variedades comerciales cultivadas en la región Soconusco, Chiapas, México, con base en siete sistemas isoenzimáticos. Los mangos analizados tienen como nombres comunes: Coche, Piña, Madura verde, Canela, Amate, Tecolote, Oro, Tapanero, Manilón, Alcanfor, Manzana, Manililla, Blanco, Melocotón, Amatillo, Pomarrosa, y las variedades mejoradas fueron: Ataulfo (de 50 y 70 años edad), Tommy Atkins, Kent y Manila. Veinte marcadores polimórficos fueron localizados aunque, ningún sistema enzimático, por si solo, permitió diferenciar a cada uno de los mangos estudiados; sin embargo, la unión de los sistemas enzimáticos GPI-1 y GPI-2, generó patrones únicos que permitieron caracterizar a los diferentes mangos. El dendrograma indicó la existencia de 83 % de similitud entre las variedades analizadas, formando tres grupos: uno incluyó al mango Pomarrosa, diferente al resto de los individuos; otro grupo incluyó a los individuos criollos con características similares del fruto, así como alta cantidad de fibra y de azúcares y no comercializables. El tercer grupo incluyó mangos comerciales y algunos criollos que son comercializados localmente y que comparten similitudes en algunas características del fruto, como ausencia de fibra en la pulpa, alta cantidad de azúcares, entre otras. Español